viernes, 8 de mayo de 2020

Cervantes

                        MIGUEL DE CERVANTES

1- Una vida de peligros y adversidades

Miguel de Cervantes Saavedra nació en Alcalá de Henares (Madrid) en 1547. Vivió una infancia poco estable a causa del carácter de su padre, quien tendía a endeudarse y a trasladar el domicilio familiar con bastante frecuencia debido a su profesión de cirujano.

En su adolescencia se aficionó al teatro, viendo los "pasos" de Lope de Rueda en Sevilla. Estudió en Madrid con un maestro humanista, López de Hoyos, pero no llegó a realizar estudios universitarios. Cervantes fue un autodidacta.

Se trasladó a Italia, donde se puso al servicio del cardenal Giulio Acquaviva (en Roma estuvo dos años). Su contacto con el arte y la literatura del Renacimiento italiano influyó de manera decisiva en su pensamiento y en su obra literaria.

Su carrera de soldado comienza cuando se enrola en la Armada española. Participó en la batalla de Lepanto y, como consecuencia de las heridas que allí sufrió, perdió la movilidad de su mano izquierda.

En 1570 fue secuestrado por los corsarios turcos cuando regresaba a España en barco y conducido posteriormente a Argel, donde pasó cinco años cautivo, a pesar de varios intentos de fuga. Fue liberado en 1580 cuando los padres trinitarios pagaron un rescate de 500 escudos, unos 20000 euros (seguramente por eso pidió ser enterrado en la iglesia de las Trinitarias de Madrid). La experiencia del cautiverio influyó mucho en la personalidad del autor y dejó una huella importante en su obra como en "Los tratos de Argel", "Los baños de Argel" y el relato de la historia del cautivo, que se incluye en la primera parte del Quijote.

Tras ser recatado, solicitó una vacante en las Indias, pero le fue denegada, quizá por su origen judeoconverso. Su situación económica empeoraba y se casó con una joven toledana que le aportó una pequeña dote.

Consiguió un trabajo como recaudador de impuestos, oficio que le obligó a viajar con frecuencia por Andalucía y los campos de la Mancha, pero acabó en la cárcel a causa de la quiebra del banco donde había depositado los fondos recaudados.

Después se trasladó a Valladolid, donde vivió otro breve episodio carcelario. En esta época consiguió que se editaron algunas de sus obras. Pero el éxito no llegó hasta que publicó la primera parte de El Quijote, en 1605. Murió en Madrid el 23 de abril de 1616.

Cervantes cultivó todos los géneros, pero no triunfó en los que más éxitos reportaban en su época: la poesía y el teatro. En la lírica no logró triunfar porque cree que no tiene talento para ella, "Yo que siempre trabajo y me desvelo por parecer que tengo de poeta la gracia que no quiso darme el cielo", pero realmente no tenía el talento necesario para superar a genios como Quevedo y Góngora, que habían renovado la lírica española con dos estilos nuevos: el conceptismo y el culteranismo. Tampoco le quedaba margen para la innovación en el teatro, porque Lope de Vega ya había llevado a cabo una revolución en la escena con su comedia nueva. 

Cervantes vivió a caballo entre dos siglos y dos mentalidades: el Renacimiento (siglo XVI) y el Barroco (siglo XVII). El autor del Quijote fue testigo de cómo los ideales renacentistas entraban en crisis y daban lugar a una nueva época (la barroca) mucho más pesimista. Intentó armonizar ambas mentalidades:
1. No es tan idealista como los pensadores del Renacimiento, pero tampoco deforma la realidad de manera sistemática como los artistas barrocos. Para Cervantes ni la realidad deformada ni la perfección idealista son creíbles. Él prefiere la verosimilitud, es decir, todo aquello que, sea o no verdadero, resulta creíble a nuestros ojos.
2. El autor del Quijote no cree que nuestros sentidos ni nuestra razón nos den una única verdad sobre el mundo, como creían los pensadores del Renacimiento, pero tampoco considera que la realidad que nos rodea sea pura apariencia o engaño, como afirmaban los escritores del siglo XVII. Para Cervantes, la verdad depende del punto de vista de cada persona, lo que ha dado en llamar perspectivismo.

2- Cervantes, poeta

La mayor parte de las poesías cervantinas aparecen diseminadas en sus novelas y obras de teatro. Se trata de composiciones de influencia popular y culta. Merecen destacarse sus sonetos, en especial el titulado "Al túmulo del rey que se hizo en Sevilla". Su obra más extensa es "Viaje del Parnaso", en la que defiende la poesía y ensalza o critica a algunos poetas de su época. Es un largo poema narrativo y alegórico, escrito en tercetos.

3- Cervantes, dramaturgo

En la dramaturgia de Cervantes se pueden distinguir dos etapas:
1. En la primera hace un teatro clasicista, es decir, un teatro moralizante y que respeta las reglas de las tres unidades (una única acción transcurre en un tiempo muy corto y en un solo lugar). Las obras más importantes de este periodo son "Los tratos de Argel" en la que recrea la época de su secuestro por los turcos, y "Numancia", pieza de tema histórico en forma de tragedia. Este modo de hacer teatro no satisfacía los gustos del público, así que Cervantes fracasó. Pronto se impondría la comedia nueva de Lope de Vega, una forma innovadora de hacer teatro que no respetaba las reglas de las tres unidades.
2. En la segunda época, imitó la técnica de la comedia nueva, aunque no consiguió emular a Lope. Escribió ocho comedias (temas variados: de enredo, de capa y espada, de santos y basadas en el cautiverio) y ocho entremeses nunca representados. Su mayor aportación son los Entremeses: piezas cortas que se representaban en los entreactos de las comedias. Sus personajes y situaciones pertenecen a la vida cotidiana. Cervantes escribió en prosa algunas de estas obras, como "La guarda cuidadosa" o "El retablo de las maravillas" (parábola sobre la hipocresía, tomada de "El conde Lucanor"). También destacan los entremeses titulados "El juez de los divorcios" y "El viejo celoso".

4- Cervantes, novelista

Antes de escribir El Quijote, Miguel de Cervantes cultivó todos los géneros narrativos del Renacimiento:

-Novela pastoril. La primera parte de "La Galatea" fue publicada en 1585, pero, a pesar de sus promesas, Cervantes nunca llegó a terminarla.

-Novela morisca. En la primera parte de El Quijote aparece la narración "El moro cautivo".

-Novela corta. Cervantes introdujo en España el término italiano "novella", que tenía el significado de novela de poca extensión. A este tipo pertenecen sus doce "Novelas ejemplares", algunas de las cuales reflejan de forma realista la sociedad española de la época. Se denominan ejemplares porque el autor pretendía que los lectores sacasen de estos relatos alguna enseñanza práctica para la vida y sirviesen, además, de modelo o ejemplo narrativo para los escritores. Las más conocidas son: "La gitanilla"(historia de amor), "El coloquio de los perros" (texto dialogado), "Rinconete y cortadillo" (protagonizada por dos pícaros), "El licendiado vidriera" y "La ilustre fregona".

-Novela picaresca. El relato "Rinconete y Cortadillo" se desarrolla en un ambiente picaresco. Esta obra muestra con gran realismo la decadencia moral y económica de la España del siglo XVII.

-Novela bizantina. "Los trabajos de Persiles y Sigismunda se publicaron tras la muerte del autor (1617). Es una novela de viajes repleta de aventuras fantásticas protagonizadas por dos enamorados, que se ven obligados a separarse, y que consiguen llegar a Roma para casarse.

5- El Quijote

Cervantes no solo es uno de los mejores novelistas de todos los tiempos, sino también uno de los grandes maestros de la literatura universal. Con el Quijote, además, se consagra como el creador de la novela moderna.

Como poeta y dramaturgo, Miguel de Cervantes cosechó el fracaso, ya que no obtuvo a la altura de los grandes genios renovadores del Barroco: Góngora, Quevedo y Lope de Vega. Sin embargo, en 1605 publicó la primera parte de "El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha". El éxito fue extraordinario, se realizaron numerosas ediciones y traducciones y Alonso Fernández de Avellaneda escribió una continuación apócrifa (1614), lo que apremió a Cervantes a redactar la segunda parte: Cervantes había inventado la novela moderna. Diez años más tarde (1615) salió de la imprenta la segunda parte de esta obra universal.

Las novelas del Renacimiento narraban historias fantásticas, a veces disparatadas. A Cervantes no le gustaba este tipo de relatos, porque atentaban contra la razón.

Sin embargo, sabía que una novela sin aventuras ni disparates so sería del gusto del público. Así que se las ingenió para escribir una historia divertida en la que lo absurdo estuviera justificado, es decir, una novela que resultara verosímil, creíble. Encontró la fórmula perfecta: El Quijote es una historia llena de aventuras disparatadas, pero están justificadas porque el protagonista está loco.

-Argumento

Primera parte. El Quijote nos cuenta la historia de Alonso Quijano, un hidalgo manchego a punto de cumplir los cincuenta años que, tras volverse loco por leer libros de caballerías, decide hacerse caballero andante.
En esta parte se narran las dos primeras salidas de don Quijote y en la segunda parte se narra la tercera salida del caballero. Ahora don Quijote sabe que es un personaje famoso porque Sancho y el bachiller Sansón Carrasco lo han puesto al tanto del éxito que ha tenido la primera parte de "La historia del ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha. 

-Los protagonistas son dos figuras opuestas y complementarias: don Quijote es idealista y actúa movido por las injusticias, el bien y el amor a la dama; Sancho Panza, en cambio, es práctico y materialista, se mueve por sus intereses personales. Pero a medida que avanza la novela, se va produciendo una "quijotización" de Sancho y la "sanchificación" de don Quijote.

-Los temas

El Quijote fue concebido como una parodia de los libros de caballerías; sin embargo, en ella aparecen otros temas y laten valores como el idealismo, el heroísmo, la justicia, la solidaridad, ... Son temas que abarcan todas las facetas del ser humano: el amor cortés, la condición humana, la valoración social del mundo de las armas y del mundo de las letras, la fantasía en la literatura, la crítica literaria y el humor, producido por la parodia y la burla.

-Otras características: el manuscrito encontrado, los relatos intercalados, el diálogo, lenguaje coloquial, culto y paródico (arcaísmos), el humor, el retrato de la sociedad.

-El Quijote: novela moderna

Hay dos características que definen El Quijote como una novela moderna:
1.La complejidad psicológica de sus dos personajes fundamentales.
2.El realismo novelesco. A diferencia de las novelas de caballerías (cuya acción transcurría en un tiempo indefinido y en lugares lejanos y fantásticos), El Quijote está plagado de referencias geográficas e históricas concretas. Su modernidad radica, pues, en la capacidad de Cervantes para reflejar de manera realista el mundo que le tocó vivir (finales del XVI y principios del XVII).

-Interpretación de la obra

Es una obra universal y, como tal, admite diferentes lecturas o interpretaciones:
1.Los contemporáneos de Cervantes la interpretaron como una sátira dirigida contra los libros de caballerías, es decir, como una obra burlesca, humorística, que tenía como propósito ridiculizar una literatura pasada de moda, inspirada en los ideales caballerescos de la Edad Media.
2.Pero también hay una interpretación simbólica de El Quijote, según la cual esta novela reflejaría la eterna lucha humana entre el idealismo representado por don Quijote y el sentido práctico de la vida que encarna Sancho.
3.Hoy en día nos importan especialmente las relaciones que Cervantes establece en su novela entre la literatura y la vida, es decir, cómo las obras de ficción pueden condicionar la vida de las personas.



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